El microcemento es una de las alternativas de decoración más interesantes, pues ofrece multitud de ventajas para conseguir un ambiente completamente distinto sin meterte en obras infinitas. Te contamos todos los detalles a continuación.
¿Qué es el microcemento?
Una de las cosas más interesantes del microcemento a mi parecer, es que permite que puedas convertir cualquier espacio que te propongas en una superficie vanguardista. Es decir, puedes transformar el salón de tu casa, la cocina, el baño o cualquier dormitorio, en un espacio que te apasione, que se vea más sofisticado.
Pero ¿Qué es el microcemento? Es posible que todavía no hayas escuchado hablar de ello.
Se trata de un material que se compone, tal y como su nombre indica, por una base de cemento. A ésta se le añaden otros materiales como resinas, aditivos y pigmentos minerales que permiten que se puedan crear una gran variedad de colores.
Este microcemento se utiliza como un revestimiento que se puede aplicar sobre distintas superficies. Por ejemplo, puedes aplicarlo sobre terrazo, azulejos y una gran variedad de materiales. Esto implica que puedes echarlo sobre paredes, suelos, techos, encimeras, muebles… Y, a su vez, puedes aplicarlo tanto en el interior como en el exterior. Las opciones son muy amplias.
Ahora bien, también puedes encontrar microcemento ecológico como el de BetonCire.eco. Recibe esta denominación porque se fabrica con materiales y mediante un proceso sostenible, lo que implica que tiene un bajo impacto sobre el medio ambiente. Además, para su fabricación se trabaja con materiales reciclados, lo que permite también reducir el nivel de residuos.
Ventajas del microcemento
Una de las grandes ventajas del microcemento es que no requiere de obra. Puedes hacer una gran reforma en tu casa, puedes cambiar todo el estilo de la misma, sin que tengas que ponerte a picar, ni levantar suelo ni tener que irte de casa. Para mí, esa es una de las grandes ventajas de este material.
El revestimiento solo va a aumentar en 2 o 3 mm la superficie, por lo que no te va a restar espacio y no tendría por qué afectarte a la altura de muebles o puertas.
Otro punto muy interesante es la resistencia del mismo. Al tener una base de cemento, se trata de un material al que se le atribuye una gran resistencia sin perder en una estética cuidada, sofisticada y elegante. Por ello, está considerado como un material de larga vida útil, que es capaz de soportar tanto el paso del tiempo como las demandas del día a día.
Además, para zonas como la cocina, una de las cosas que os pueden gustar mucho es dejar de preocuparos por las juntas de los azulejos. Este revestimiento las va a eliminar, por lo que ya no tendrás que preocuparte por si se ennegrecen o se acumula la grasa. También tiene otra ventaja extra la falta de juntas o de fisuras y es que va a generar una mayor sensación de amplitud y continuidad, por lo que te parecerá que estás en un espacio más grande.
Y en cuanto a su limpieza es muy sencilla, pues no necesita ningún tipo de producto abrasivo ni un esfuerzo desmedido.
Como os he comentado antes, al tener pigmentos minerales en su composición podéis encontrar una bonita variedad de colores. Esto favorece que puedas crear un espacio completamente a tu gusto. Y, hay un detalle más, puedes modificar tanto los colores como los acabados, personalizándolo todavía más y consiguiendo que cada espacio tenga un estilo único.
Puedes encontrar acabados como el tadelakt, estuco y hormigón visto pero, al ser artesanal, todavía resultarán mucho más llamativos y bonitos. Es una de las razones por las que muchos diseñadores de interiores y arquitectos eligen este material.